El viernes, en el mundo cristiano, ha sido considerado históricamente como un día de luto, pues es aquel día de la semana en que fue crucificado Jesús de Nazareth. Un ejemplo muy claro es la decisión de Tom Sawyer de visitar un cementerio en la noche de un viernes. La asociación de este día con el fin de semana es, relativamente, muy reciente.
Otro ejemplo célebre es el viernes 13 de octubre de 1307, cuando, bajo las órdenes de Felipe IV de Francia (Felipe el Hermoso), un grupo de caballeros templarios, fue capturado y llevado ante el tribunal de la Inquisición para ser juzgado y condenado por supuestos crímenes en contra de la cristiandad. No se sabe bien si la decisión del rey francés se debió a una motivación religiosa, debida a los rumores que se tejían en torno a esta orden (de quienes se decía protegían o custodiaban secretos íntimos de la Iglesia, como el Santo Grial), o, más probablemente, a cuestiones económicas. En ese tiempo, los caballeros templarios poseían una gran fortuna, eran los principales prestamistas y acreedores en muchas regiones de Europa, en especial de Francia. Es más, se dice que el propio Felipe IV, tenía una gran deuda con esta orden y que por ello decidió capturarlos y acusarlos ante la Santa Sede por diversos cargos, entre ellos los de herejía, sodomía y de orinar y escupir en la cruz. La acusación produjo la detención o asesinato de la mayoría de los miembros de la orden del Temple, lo que finalmente ocasionó su desaparición. Sin embargo, algunos caballeros lograron escapar, llevándose consigo muchos de los secretos de la orden, hasta hoy no revelados, así como el tesoro del Temple. El último Gran Maestre de la orden, Jacques de Molay, quien finalmente fue condenado a la hoguera, momentos antes de morir asfixiado se dirigió al propio Felipe IV y al papa Clemente V, con estas palabras: «¡Clemente y Felipe, traidores a la fe cristiana, os emplazo ante el tribunal de Dios... ! A ti, Clemente, antes de que pasen cuarenta días, y a ti Felipe, antes de que termine este año... » Si bien los templarios fueron arrestados el viernes 13 de octubre de 1307, esta dramática escena tuvo lugar siete años después, el 18 de marzo de 1314; como sea, tanto el papa como el rey murieron en los plazos fijados, a saber el 20 de abril y el 29 de noviembre de ese año. (Esta historia guarda similitud con la de Fernando IV de Castilla “el Emplazado”, a quien también le advirtieron sus víctimas que moriría en un plazo de treinta días.) Los caballeros que sobrevivieron, principalmente en la isla de Chipre y en Portugal, se anexaron en su mayoría a las filas de la Orden de los Caballeros Hospitalarios o la de los Caballeros Teutónicos.
El viernes 13, diciembre de 1939, en Victoria tuvo lugar el llamado “Viernes Negro”, considerado como uno de los peores incendios forestales en la historia de la humanidad y el más grave en Australia. Dejó un saldo de 71 muertos, casi 20,000 km ² de tierra arrasada por las llamas y más de 3 mil personas sin hogar.
El viernes 13, octubre de 1972, el vuelo 517 de la Fuerza Aérea Uruguaya se estrelló en los Andes. Abordo iban 40 pasajeros y 5 tripulantes, entre quienes se encontraban integrantes equipo de rugby Old Christians. 72 días después fueron rescatadas 16 personas con vida, este suceso es conocido popularmente como “El Milagro de los Andes”.
Un virus infectó a cientos de computadoras IBM, provocando que muchos archivos se perdieran y se creara el caos, ya que en ese entonces este tipo de ataques masivos eran poco comunes.
Después de pasar seis días hospitalizado murió el rapero Tupac Shakur (2Pac), quien el 7 de septiembre de ese año había recibido tres disparos durante un tiroteo en el área metropolitana de Las Vegas.
El viernes 13, enero de 2012, 32 personas murieron cuando el crucero Costa Concordia chocó contra las rocas de la Isla Giglio y naufragó. Fueron rescatas 4,200 personas.
Por otro lado, fue un viernes 13, noviembre de 2015, cuando Francia sufrió el primero de los atentados terroristas de París.